NO PUEDE FALTAR EN TU DESPENSA (3): GERMINADOS
Hoy compartimos esta entrada sobre germinados. De esta manera seguimos con la serie que empezamos hace unos meses hablando de ingredientes que considero es fundamental que conozcáis y tengáis en vuestras despensas.
Los germinados son un alimento muy interesante por su alto nivel nutritivo. Contienen todos los nutrientes que la planta necesita para desarrollarse. Al germinarlas algunos de sus nutrientes, como las vitaminas, se multiplican exponencialmente. Otros se vuelven más fáciles de ser asimilados .
Entre los beneficios de los germinados se encuentran el fortalecer y mejorar el funcionamiento de la flora intestinal, contribuir a depurar el organismo y fortalecer el sistema inmunitario y luchar contra la acción de los radicales libres gracias a su poder antioxidante.
Es muy fácil producirlos en casa y de esa manera los consumiréis bien frescos y con todas sus propiedades. Para ello os recomiendo que tengáis una bandeja germinadora. También podéis investigar en internet. Hay maneras muy sencillas de conseguir que las semillas germinen en botes de cristal, etc.
A mi las bandejas me dan buen resultado y me parece un método muy sencillo.
Podéis comprarlas en centros de jardinería y tiendas de productos ecológicos e incluirá instrucciones. Yo tengo una de barro en lugar de plástico con tres pisos, de manera que puedo cultivar varios germinados diferentes a la vez.
El proceso es tan sencillo como colocar en la bandeja (que tiene unos agujeros para que caiga el agua) las semillas (una cucharada) previamente puestas a remojo unas 12 horas y mojarlas.
Tiene un plato debajo en el que voy echando agua los siguientes días para que las semillas estén siempre húmedas.
Se puede germinar cualquier semilla pero entre las maś comunes están las semillas de alfalfa. Éstas dan muy buen resultado pero podéis probar con la que queráis. También es muy sencillo germinar lentejas y en casa hemos probado también con las de mostaza.
Una vez comenzado el proceso, y en función del tipo de semilla, podréis empezar a consumir los germinados a partir del cuarto o quinto día.
¡Esperamos que esta información os sea de utilidad!!! Si probáis a germinar vuestras propias semillas en casa me encantaría saber si os ha salido bien. Podéis escribir vuestros comentarios!! Nos gusta conocer vuestra opinión.
Podéis seguirnos en Instagram (@Divergetariana), donde compartimos la comida que cocinamos a diario, o en Facebook y suscribiros al blog para que os lleguen las nuevas publicaciones por correo electrónico.
Consejos relacionados:
Los germinados son un alimento muy interesante por su alto nivel nutritivo. Contienen todos los nutrientes que la planta necesita para desarrollarse. Al germinarlas algunos de sus nutrientes, como las vitaminas, se multiplican exponencialmente. Otros se vuelven más fáciles de ser asimilados .
Entre los beneficios de los germinados se encuentran el fortalecer y mejorar el funcionamiento de la flora intestinal, contribuir a depurar el organismo y fortalecer el sistema inmunitario y luchar contra la acción de los radicales libres gracias a su poder antioxidante.
Es muy fácil producirlos en casa y de esa manera los consumiréis bien frescos y con todas sus propiedades. Para ello os recomiendo que tengáis una bandeja germinadora. También podéis investigar en internet. Hay maneras muy sencillas de conseguir que las semillas germinen en botes de cristal, etc.
A mi las bandejas me dan buen resultado y me parece un método muy sencillo.
Podéis comprarlas en centros de jardinería y tiendas de productos ecológicos e incluirá instrucciones. Yo tengo una de barro en lugar de plástico con tres pisos, de manera que puedo cultivar varios germinados diferentes a la vez.
El proceso es tan sencillo como colocar en la bandeja (que tiene unos agujeros para que caiga el agua) las semillas (una cucharada) previamente puestas a remojo unas 12 horas y mojarlas.
Tiene un plato debajo en el que voy echando agua los siguientes días para que las semillas estén siempre húmedas.
Se puede germinar cualquier semilla pero entre las maś comunes están las semillas de alfalfa. Éstas dan muy buen resultado pero podéis probar con la que queráis. También es muy sencillo germinar lentejas y en casa hemos probado también con las de mostaza.
Una vez comenzado el proceso, y en función del tipo de semilla, podréis empezar a consumir los germinados a partir del cuarto o quinto día.
¡Esperamos que esta información os sea de utilidad!!! Si probáis a germinar vuestras propias semillas en casa me encantaría saber si os ha salido bien. Podéis escribir vuestros comentarios!! Nos gusta conocer vuestra opinión.
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Consejos relacionados:
- Los germinados se pueden emplear en multitud de recetas.
- A mí me gustan especialmente en ensaladas y adornando casi cualquier plato.
- Una vez que el germinado ha alcanzado el tamaño deseado lo puedes guardar en la nevera y se conserva perfectamente durante unos días.
- Es recomendable usar semillas ecológicas.
- Podéis consultar las otras entradas sobre ingredientes que no pueden faltar en tu despensa aquí: NO PUEDE FALTAR EN TU DESPENSA (1): SEMILLAS Y OTROS CONDIMENTOS y NO PUEDE FALTAR EN TU DESPENSA (2) VERDURAS DE TEMPORADA: PRIMAVERA
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